El vapeo, practica sustitutiva del hábito del consumo del tabaco, hoy es una moda para nada pasajera, y según estudios en materia se está instalando entre los adolescentes de España y el mundo. No obstante, los padres deben prestar atención a este hábito, ya que de no ser tomado de forma responsable, podría traer consecuencias negativas para la salud de sus hijos.
¿Qué es vapear?
Para que los padres entiendan a que nos referimos cuando halamos de vapear. Vape Desechable, tienda de vaper online, explica que vapear (o vaporear) es el acto de inhalar y exhalar el vapor producido por el líquido de nicotina calentado (a menudo llamado “jugo”) de un cigarrillo electrónico (e-cigarette o e-cig en inglés), pluma o vaporizador personal. Practica, la cual, se ha estado poniendo muy de moda en los últimos años y en público de todas las edades.
Esto en principio surgió como una ayuda para los fumadores que querían abandonar el uso del tabaco, permitiéndoles ir abandonándolo de forma paulatina mientras satisfacen su necesidad de nicotina con menos efectos perjudiciales para la salud de los que trae el cigarrillo.
No obstante, debido a su estética, sus sabores y olores, se ha convertido en un producto muy popular, no solo entre el público para el que fue hecho, sino también entre aquellos que nunca habían consumido nicotina anteriormente., e incluso, entre los más jóvenes.
Sarper Taskiran, MD, psiquiatra de niños y adolescentes del Child Mind Institute atribuye dicha popularidad a los envases y la publicidad que se le hace a los vapers. “Los adolescentes buscan la innovación y se sienten atraídos por el diseño elegante y la facilidad de uso. Parece como un producto de Apple”.
Cigarrillo electrónico: una tendencia al alza
Según los últimos datos publicados por Sanidad, procedentes de la encuesta ESTUDES, una encuesta bianual que tiene como finalidad conocer la situación sobre tendencias, consumo de drogas y otras adicciones entre los estudiantes de enseñanza secundaria, se puede notar como el cigarrillo electrónico es cada vez más popular entre los jóvenes, esto según datos como:
- Casi la mitad de los estudiantes de 14 a 18 años ha utilizado en alguna ocasión cigarrillos electrónicos.
- Solo una minoría ha recurrido al cigarrillo electrónico para reducir su consumo de tabaco o para dejar de fumar: por lo que se puede concluir que la mayoría adquiere el hábito solo por gusto o moda.
- Esto explica el siguiente dato que arroja que los dispositivos más consumidos son los que no contienen nicotina.
Riesgos del vapeo
La preocupación detrás de esta moda nueva entre los adolescentes está en los riesgos que les puede traer el consumo de los mismos a la salud. Los cuales no están relacionados al producto en sí, sino a un uso incorrecto del mismo por la falta d responsabilidad e información en materia que pueden tener los más jóvenes. Algunos de los riesgos son:
- Los cigarrillos electrónicos contienen altos niveles de nicotina, por lo que lo vuelve un hábito muy adictivo y esto en combinación con lo susceptibles que son los adolescentes, ya que no han madurado su carácter y toma de decisión como la de los adultos, los vuelve una mala mezcla.
- La adicción puede afectar la capacidad de concentración. El Dr. Taskiran ha observado que el vapeo inicialmente aumenta el estado de alerta y atención, pero luego lleva a una disminución en la capacidad de atención: “no puede quedarse quieto porque comienza a sentirse ansioso, no puede pensar en las preguntas y simplemente comienza a inquietarse”.
- Los cigarrillos electrónicos y dispositivos similares contienen compuestos cancerígenos, según un estudio reciente
- Otro estudio descubrió que el vapeo, de hecho, causa irritación pulmonar similar a la observada en fumadores y causa daños a células vitales del sistema inmunológico.
- Ha habido varias muertes y cientos de casos de enfermedades pulmonares atribuidas al vapeo, aunque aún no se tiene claro la causa del problema.
- El vapeo aumenta la frecuencia cardíaca y la presión arterial, por lo que puede aumentar los problemas circulatorios.
Puerta de entrada a otras adicciones
Los cigarrillos electrónicos no deben ser vistos como un arma mortal, el problema viene de la responsabilidad con la que se tome su consumo y las razones que lleven a ello.
Los fumadores que quieren abandonar el tabaco encuentran en el cigarrillo electrónico una forma de saciar su necesidad de nicotina (porque si, los cigarrillos electrónicos, la mayoría contiene nicotina, siendo perjudicial para el que no la consuma con anterioridad) pero de una forma menos agresiva que el tabaco. El problema es que si antes no lo consumías, estos vapers pueden ser el inicio de una adicción a la nicotina.
Igualmente, si es un hábito que no es tomado con responsabilidad y no se tiene una buena educación en casa, puede pasar a ser un canal para el consumo de otras drogas como tabaco o cannabis y a las consecuencias de ello, esto según otros datos interesantes del estudio:
- De cada 10 adolescentes que fuman tabaco, 8 han usado también cigarrillos electrónicos.
- Se ha triplicado el porcentaje de adolescentes que utilizan el cigarrillo electrónico para fumar cannabis.
- Hay una nueva enfermedad pulmonar, asociada con un aditivo (acetato de vitamina E) que se usa en los líquidos de vapeo que contienen un derivado del cannabis, que se está generando más que todo en menores.
- Quienes han usado cigarrillos electrónicos alguna vez manifiestan una menor percepción de riesgo asociado al consumo de tabaco o de cannabis que quienes que nunca han vapeado.
¿Por qué los padres deberían estar preocupados?
El problema con los adolescentes es que escuchan que el vaper es menos dañino que el tabaco y lo asocian con que es algo inofensivo. De hecho, “Realmente piensan que son principalmente sabores y que están inhalando un gas agradable”, dice el Dr. Taskiran.
Por otra parte, es un producto que viene en un empaque muy atractivo y que no hace énfasis en los riesgos de consumirle. Esto, en conjunto con que fumar se sigue considerando algo “genial” entre los adolescentes y que mejora su estatus social, conlleva a que estos le den una oportunidad y se vuelvan adictos si no se lleva con responsabilidad.
A todo esto, también le sigue el problema de que su uso por menores no está restringido como si pasa con el tabaco. Un adolescente puede ir a cualquier tienda y comprar un vaper y sus sabores y aromas con toda naturalidad. Incluso, pueden hacer la compra de los mismos desde la comodidad y practicidad de Internet.
OCU pide que se impida el uso de e-cigarrillos a menores
En vista de estos datos tan alarmantes, OCU está pidiendo a las autoridades sanitarias que hagan lo posible por prohibir el uso de cigarrillos electrónicos en menores de edad, así como prohíben el uso del tabaco, y tratándole de la misma forma en materia de publicidad, compra, espacios libres de humo… Y también insisten en que dediquen más recursos a campañas de información y sensibilización a los adolescentes. No obstante, que los adolescentes tomen consciencia sobre el asunto no solo está en manos de la industria y su publicidad, en gran parte se tratará de la intervención de los padres
¿Cómo hablar con los niños sobre el vapeo?
Los padres deben hablar con sus hijos sobre lo que de verdad representa el uso del vaper para intentar guiarlos de una mejor manera hacia un consumo responsable, que no es ni por modas, ni por quedar bien con los amigos de la escuela, y que no se convierta en un canal hacia el consumo de drogas que podrían afectar su salud.
Para poder hacer esto, lo primero es que el padre se eduque a si mismo sobre las características y riesgos de los vapers, para que puedan hablar de ello desde un enfoque informado, realista, positivo y curioso. Además de no comenzar prohibiéndolos y generando un rechazo hacia la charla, sino más bien abriendo una conversación que lleve al dialogo sano.
También es bueno indagar en la realidad de la escuela, si hay muchos otros niños que vapena, que tan seguido lo hacen, como se sienten al hacerlo, etc., de forma que se pueda conocer hasta que punto es un asunto de gravedad.
No obstante, los padres deben contar también con el apoyo de la escuela en esta tarea. “Las escuelas también deben ser responsables por esto y proporcionar estrategias educativas tanto para maestros como para estudiantes”, dice el Dr. Taskiran.
Igualmente, hay que pensar que la prevención es mucho mejor arma en estos casos de lo que será el tratamiento del problema más adelante, al igual que la misma educación, información y feedback que se puedan dar entre compañeros es más que clave, ya que la prevención vendrá de esas personas con las que ellos mismos se sienten tan identificados y que forman parte de su mismo circulo social.
Finalmente, si el caso es que tu hijo ya podría estar volviéndose adicto al vaper, la recomendación es asistir con un especialista. “Esta es una verdadera adicción a la nicotina”, dice Taskiran. “Las personas suelen pensar que esto es diferente del uso de cigarrillos, pero puede ser más grave que el uso de cigarrillos”.